Tras lanzar al mercado el modelo Z Flip original, Samsung decide hacer una actualización a su gama alta plegable “Galaxy Z Flip” y dotarlo con un procesador capaz de conectarse a redes 5G.
Cuando probamos el Galaxy Z Flip de Samsung nos quedamos con las ganas de verlo mejor implementado en potencia y conectividad. Pese a ser un equipo que compite prácticamente solo en el mercado – el Moto RAZR de Motorola no llegó a varios países -, la surcoreana apostó por no arriesgar en el primer modelo flexible a tamaño reducido. Ahora, Samsung decide renovar la línea Z con pequeños detalles que le dan más potencia.
Este nuevo Z Flip llega con el procesador Qualcomm Snapdragon 865+, una versión mejorada del chipset incorporado en la nueva línea S20 y que, a diferencia del 855 actual que aloja el primer modelo bajo el chasis, permite la conectividad 5G.
Respecto a los otros componentes, no hay diferencia con el modelo previo anunciado en febrero del 2020. Mantenemos la misma capa de personalización One UI optimizada para la pantalla flexible, el miso juego de cámaras y la misma autonomía.
Este Snapdragon 865+ es uno de los más recientes lanzamientos de Qualcomm, y equipos como el ROG Phone 3 de Asus ya lo integra bajo el chasís. A diferencia del modelo 865 a secas, optimiza entre un 10 y 15% el desempeño integral del equipo, además de incluir un modem 5G para conexiones más veloces.
Esta nueva versión de Z Flip 5G comenzará a venderse desde el 7 de agosto y tendrá un precio de 1499 dólares, 100 más que el modelo original en Estados Unidos. Este anuncio antecede a la presentación del Note 20 el 5 de agosto.
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