El tenista español se encontraba en un partido de exhibición, cuando decidió detener las acciones para ayudar a una desesperada madre.
Una madre había perdido a su hija y la llamaba a gritos en las gradas. Rafael Nadal estaba al saque, pero notó la desesperación de la mujer y paró su partido de exhibición ante el ex jugador estadounidense John McEnroe. El público y el personal de seguridad en el Rafael Nadal Sport Center de Mallorca comenzaron la búsqueda. Hasta la televisión cambió la acción de la cancha por lo que sucedía en la tribuna.
Todo duró unos segundos. La niña se había alejado apenas unos metros de su madre. Ambas se encontraron, se abrazaron y rompieron en llanto. Con su pequeña ya en brazos, la mujer agradeció al tenista español por su gesto. Él le respondió con una sonrisa, contento por algo mayor que un simple partido. Punto para Nadal.
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