El proyecto Circular elabora prendas nuevas con mermas textiles; es decir, retazos de tela que podrían ser desechados. Además, con la reutilización del algodón, dan un respiro a las plantaciones de este insumo y ahorran agua.
Según la ONU, la industria de la moda es la segunda más contaminante del planeta. Fue precisamente este dato clave lo que llevó al ingeniero Carlos Vega y a la comunicadora Natalia Tapia a repensar la manera de elaborar prendas en el país.
Así nació Circular, un emprendimiento sostenible que elabora prendas con los sobrantes de las fábricas textiles que podrían terminar en la basura. “Nos cuestionamos cómo podíamos hacer para contribuir al cuidado del medio ambiente. Nuestra visión siempre ha sido hacer las cosas de la manera más sostenible posible”, señala Carlos Vega, líder del proyecto Circular.
Las telas que usan para elaborar los polos provienen del reciclado de los conos de hilos deadstock, es decir, insumos nuevos que fueron adquiridos por las fábricas pero que al no ser usados a menudo son desechados. Estos conos obtenidos son separados por grosor, color y luego son distribuidos en cantidades iguales para finalmente tejer la tela con la que se confeccionarán nuevas prendas.
Durante el proceso de elaboración de las prendas de vestir no se usan contaminantes, ni químicos. Además, logran ahorrar miles de litros de agua al utilizar algodón recuperado y dan un respiro a las plantaciones de esta materia prima.
Ropa nueva sin generar desperdicios
En el 2019, el equipo de Circular confeccionó el primer jean de tela recuperada en el Perú. Esto gracias al financiamiento de 50 mil soles que otorgó el Programa Innóvate Perú a través del Concurso Reto Bio, una iniciativa que cofinancia emprendimientos que promueven el desarrollo de soluciones innovadoras y efectivas que pongan en valor nuestros recursos naturales.
Actualmente Circular elabora prendas como polos, casacas y pantalones que ya generan un impacto positivo en el ambiente. De hecho, por cada pantalón de algodón recuperado ahorran 2 700 litros de agua, equivalente a lo que bebe un ser humano por cuatro años.
Después de un año de pandemia y de situaciones difíciles que tuvieron que afrontar como emprendimiento, ya se encuentran en el mercado con un par de colecciones lanzadas. Asimismo, su trabajo ha sido reconocido con el segundo lugar en los Premios Latinoamérica Verde 2020 en la categoría manejo de residuos.
A continuación, conoce más sobre este emprendimiento sostenible:
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