Tras un inversión de más de $400 millones en publicidad, el empresario y ex alcalde de Nueva York Mike Bloomberg se “estrenó” como precandidato a la presidencia de los Estados Unidos, y el resultado fue decepcionante. Su participación en el debate Demócrata celebrado en Las Vegas convenció a muy pocos. Bloomberg fue atacado duramente por sus compañeros candidatos. Elizabeth Warren inició la ofensiva acusándole de ser otro multimillonario arrogante y misógino, en clara referencia a Donald J. Trump. Joe Biden cuestionó los “logros” de su gestión como alcalde de la Gran Manzana. Bernie Sanders enfatizó su apoyo a Stop and frisk (detener y registrar), una táctica policiaca condenada como racista implementada por la policía de Nueva York durante la gestión de Bloomberg. Pete Buttigieg le criticó que pretendiese “comprar” la presidencia. Amy Klobuchar le acusó de esconderse tras su millonaria campaña publicitaria. El principal beneficiario de este arremetida contra Bloomberg lo fue, sin lugar a dudas, Sanders, pues concentrados en atacar al ex alcalde, los demás candidatos olvidaron que el Senador por Vermont es quien lleva la delantera en la carrera hacia la Casa Blanca.
Bloomberg no fue capaz de responder de forma convincente las críticas de sus compañeros de partido y se concentró en presentarse como el único candidato que puede derrotar a Trump. Tampoco dejó claro cuál es la propuesta principal de su candidatura. Favorito de los medios de comunicación estadounidenses –principales beneficiarios de su millonaria campaña publicitaria– y, aparentemente, también del establishment Demócrata, Bloomberg se mostró indefenso y vacío. Ante el hasta ahora evidente desplome de la candidatura de Biden, Bloomberg se transformó en la esperanza blanca (nunca más literal) de la oligarquía, preocupada por el ascenso de Sanders. Si algo quedó claro en Las Vegas es su gran vulnerabilidad política. Republicano convertido en Demócrata, neoliberal, misógino, homofóbico, racista y clasista, Bloomberg es el reflejo de Trump en el espejo. ¿Quieren los Demócratas combatir fuego con fuego? ¿Apoyarían los sectores liberales progresistas a este a este lobo de derecha disfrazado de cordero de centro? Está por verse si el poderoso caballero, Don Dinero, será suficiente para llevarle a la Casa Blanca.
Comparte esta noticia