Muchos conocen Cusco como capital del Imperio Inca y a Machu Picchu como una de las últimas construcciones de los incas. Pero pocos saben que varios componentes de la organización social y elementos culturales del imperio Inca provienen de la civilización Caral.
La Zona Arqueológica Caral (ZAC), descubierta por la arqueóloga peruana Rudy Shady a finales de octubre de 1994, es la civilización más antigua de América, formada en el área norcentral peruana hace 5 mil años (entre los 3 mil y 1,800 años a.C.). Caral fue el primer estado político formado en Perú 4,400 años antes que los Incas.
La ZAC está ubicada en la zona media baja del valle de Supe, a 25 kms. del mar. Los caralinos eligieron un espacio estratégico, que denominaron “Zona Capital”, donde construyeron la Ciudad Sagrada de Caral y otros siete centros urbanos. Tiene una expansión de 68 hectáreas y está compuesta por 32 monumentos arquitectónicos.
Entre los monumentos principales sobresalen siete, tres plazuelas, tres plazas circulares hundidas, una gran plaza central y dos plazuelas. En los muros de los edificios públicos fueron hallados “shicras” o bolsas de fibra vegetal con piedras, que sirvieron como una técnica resistente a sismos.
La civilización Caral logró un avance sin precedentes en completo aislamiento. Los caralinos evitaron construir muros de gran longitud y en forma escalonada. Estas y otras tecnologías les dieron gran durabilidad a los edificios monumentales y lograron perdurar hasta hoy, pese a haber sido construidos en zonas altamente sísmicas.
También edificaron altares con fogones en todos los edificios públicos para fines rituales. Previamente al diseño arquitectónico, identificaron la dirección del viento, para incrementar su velocidad y lograr flamas de altas temperaturas. Caral tiene un paisaje rodeado de cerros, con un rico acuífero, buena irradiación solar durante el año, casi nula precipitación y moderados vientos.
Los pobladores de Caral comprendieron que era necesario vivir en armonía entre ellas y con las otras poblaciones de culturas e idiomas diferentes. La mujer tuvo un rol protagónico, como cogestora de una civilización que produjo ciencia, arte y tecnología.
La religión también tuvo un fin social para afianzar la cohesión de la población. Los líderes religiosos, mediadores del grupo social, representaban el poder sobrenatural de los ancestros y dioses. A su vez, eran especialistas en astronomía para predecir cambios ambientales y asegurar la producción económica.
El último viernes y sábado de octubre se conmemora un aniversario más del inicio de las investigaciones de la Ciudad Sagrada de Caral, lideradas por la arqueóloga peruana Ruth Shady y su equipo de investigadores. En octubre del 2024, la ZAC se prepara para celebrar su treinta aniversario por el inicio de las investigaciones y puesta en valor.
Por otro lado, el 28 de junio de 2009, la ZAC ingresó a la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, confirmando su valor universal excepcional que debe ser protegido para beneficio de la humanidad. Para más información sobre Caral ingresa a www.zonacaral.gob.pe
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