El actor interpreta a un joven con adicción a las drogas en la cinta "Beautiful Boy". Él se mostró partidario de la legalización de la marihuana. "La adicción no tiene límites, ni discrimina razas", señaló.
Timothée Chalamet se mostró partidario de la legalización de la marihuana durante la presentación de "Beautiful Boy", una cinta sobre los intentos desesperados de una familia por sacar a su hijo de su adicción a las drogas.
"En EE.UU. hay adictos no violentos a los que pillan con pequeñas cantidades de droga y pasan mucho tiempo en la cárcel, muchos afroamericanos, y eso no está bien. Son cosas que pasan allí que creo que están mal, desfasadas, y sí, estoy a favor de la legalización", afirmó el joven actor en el Festival de San Sebastián.
Un minuto antes, el director Felix Van Groeningen se declaró partidario de "dejar de meter a los adictos en la cárcel", preguntado por su posición ante la inminente legalización de la marihuana en Canadá.
LA ADICCIÓN NO DISCRIMINA
Basada en dos libros autobiográficos de la familia Sheff, "Beautiful Boy" cuenta una historia de supervivencia, recaída y recuperación de una familia acomodada.
"Mi experiencia no se acerca a la de mi personaje, pero entiendo a Nick, porque yo también tengo a veces un deseo insaciable de cumplir deseos que a veces no llego a satisfacer, como ser actor, a veces mi motor comienza a funcionar al cien por cien, entiendo perfectamente lo que es desear algo intensamente", dijo Timothée Chalamet, nominado al Óscar por "Call Me By Your Name".
El actor de "Interstellar" (2014) y "Lady Bird" (2017) perdió ocho kilos para hacer la película, que se rodó sin orden cronológico. En este trabajo, agregó, no quería ser un actor haciendo muy bien de yonki sino "hacer que el público pensara: 'Oh, Dios, ese podría ser mi hermano, o mi hijo'".
"Si algo me ha quedado claro tras hacer esta película es que la adicción no tiene límites, ni discrimina razas, estatus, o géneros", señaló Chalamet. (EFE)
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