Toda persona tiene derecho a estar tranquila, emocionalmente bien, y es una tarea que tenemos que hacerla todos los seres humanos. Y muchos ayudamos a nuestros semejantes dándoles consejos, pero que nos es difícil aplicarlos a nosostros mismos. Por eso, antes de aconsejar debemos que empezar a conocer nuestras emociones.
Toda persona tiene derecho a estar tranquila, emocionalmente bien, y es una tarea que tenemos que hacerla todos los seres humanos. Y muchos ayudamos a nuestros semejantes dándoles consejos, pero que nos es difícil aplicarlos a nosostros mismos. Por eso, antes de aconsejar debemos que empezar a conocer nuestras emociones.
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