Con el regreso a clases, surge una duda que a menudo pasa desapercibido: la mochila escolar. ¿Cómo podemos asegurarnos de que los niños llevan una mochila adecuada? Para responder a esta pregunta consultamos al médico fisiatra Irvin Morón, quien proporcionó valiosos consejos para seleccionar la mochila perfecta.
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Regreso a Clases: Consideraciones Esenciales para Elegir la Mochila Ideal para tus Hijos
Según el médico fisiatra Irvin Morón, uno de los aspectos más críticos es el peso de la mochila en relación con el del niño. En esa línea, recomienda que la mochila no supere el 10% del peso corporal del menor. Por ejemplo, si un niño pesa 30 kilos, la mochila no debe pesar más de 3 kilos. Sobrepasar este límite puede causar una carga excesiva en la espalda y provocar problemas musculoesqueléticos a largo plazo.
Acerca de las mochilas con ruedas, el Dr. Morón destaca la importancia de considerar el entorno escolar del menor. Si el niño asiste a clases en un edificio de varios pisos, como el segundo, tercero o incluso cuarto piso, los padres deben tener en cuenta que, en lugar de rodar la mochila, el niño deberá levantarla. Esta precaución adquiere una relevancia significativa para evitar lesiones innecesarias, especialmente en las áreas de la espalda y los hombros, causadas por el esfuerzo de levantar la mochila.
Siguiendo esta línea, enfatiza la postura adecuada al llevar la mochila. Insiste en que el menor debe empujar la mochila hacia adelante, manteniendo una postura erguida con la cabeza alineada con los hombros y la cadera. Es esencial que el niño lleve la mochila delante de su cuerpo, en lugar de jalarla desde atrás.
El doctor Morón también advierte sobre el tamaño adecuado de la mochila. Esta no debe exceder la altura de los hombros del niño, ni sobrepasar los 5 cm por encima de la cintura. Superar estas medidas puede aumentar el riesgo de lesiones y trastornos posturales.
Consideraciones extras a tomar en cuenta
Otro punto fundamental es la distribución del peso dentro de la mochila. El Dr. Morón enfatiza en colocar los objetos más pesados cerca de la espalda del niño, mientras que los más ligeros deben ir en los bolsillos externos. Esta disposición ayuda a mantener una postura adecuada y a prevenir lesiones.
En cuanto a las posibles consecuencias de cargar una mochila inadecuada, el médico señala que pueden incluir dolor muscular, lesiones en ligamentos y tendones, así como trastornos posturales como la escoliosis. Estos problemas pueden requerir tratamiento médico, e incluso en casos severos, intervención quirúrgica.
Para los padres preocupados por la salud de sus hijos, el médico fisiatra ofrece tres consejos claves. Primero, asegurarse de que la mochila no exceda el 10% del peso corporal del niño. Segundo, verificar que las correas sean gruesas y estén ajustadas a la altura de los hombros. Y tercero, mantener el tamaño de la mochila dentro de los límites recomendados.
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Consideraciones a la hora de elegir una mochila para tus hijos
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