La dirección de la institución educativa Nuestra Virgen de la Paz, encargó preparar 200 platos de comida, a los niños se les repartió ceviche de pota, mientras que a los adultos ceviche de caballa. Los pacientes ya se encuentran estables y en sus domicilios.
Setenta y tres personas: 55 niños y 18 adultos resultaron intoxicados al haber consumido alimentos en mal estado. Ellos abarrotaron el establecimiento de salud del centro poblado de Cuculí en el distrito de Chongoyape, ubicado a 1 hora y 20 minutos de Chiclayo (región Lambayeque), para ser atendidos, ante los fuertes dolores de estómago, diarrea y vómitos que presentaban.
Hasta aquí, también, desde tempranas horas se movilizaron médicos de los centros de salud de Pósope, Pampagrande y de Chongoyape (ciudades cercanas) para atender a padres y alumnos del colegio n°11508 “Nuestra Virgen de la Paz”, quienes ingresaron al establecimiento durante toda la noche y la mañana de hoy.
“Hemos activado el protocolo de emergencia que se debe de usar en estos casos. Al igual que hace cinco años atrás, cuando hubo una intoxicación masiva por comer pollo a la brasa descompuesto, nos están apoyando profesionales de otros establecimientos médicos; sin embargo, aún es poco el personal”, detalló el el médico responsable del establecimiento, César Cobeñas Villarreal.
A pesar de las limitaciones, la atención a los pacientes se brindó adecuadamente y se logró estabilizar a la gran mayoría de ellos. Solo tres fueron trasladados al centro de salud de Chongoyape: “Se les ha aplicado suero intravenoso y han evolucionado favorablemente”, concluyó.
Actividad escolar
Según se conoció, la intoxicación se produjo luego de que los padres y alumnos participaron del almuerzo por el aniversario de la institución educativa en mención.
“Nos han dado arroz, frijoles, cabrito y ceviche. Yo creo que la menestra ha estado malograda, pues tenía un olorcito desagradable, pero igual la comí porque tenía hambre”, expresó Marilú Carranza, madre de familia.
“Lo que preocupa son los niños, ellos son quienes más sufren con el dolor. Nosotros los grandes podemos aguantar”, comentó.
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