Familiares han recorrido varios hospitales de la región y todos les niegan la atención. Mujer lleva dos días con un feto de cuatro meses muerto en su vientre.
Familiares de una mujer de 39 años exigieron urgente atención médica para su pariente que tiene un feto fallecido en su vientre. Según dijeron, los hospitales se niegan a atenderla por dar positivo a la COVID-19.
Indicaron que en el hospital de Chepén de EsSalud (La Libertad) le confirmaron que el feto ya no tenía vida y la refirieron al hospital Almanzor Aguinaga de Chiclayo, donde le tomaron una prueba rápida para la COVID-19 y dio positivo.
Su hermano contó a RPP que los médicos de este hospital le dijeron que no podían atenderla y la refirieron al hospital Luis Heysen de Essalud, designado para la atención de pacientes con la COVID-19, pero en este establecimiento tampoco la atendieron.
La paciente, que lleva cuatro meses de gestación, se dirigió al Hospital Regional de Lambayeque del Ministerio de Salud, donde hasta el momento no la atienden y está en la calle esperando que la dejen ingresar.
Lambayeque
Los familiares pidieron la presencia de la Fiscalía para que la mujer pueda ser atendida.
El peligro de su situación es alto pues, dijeron, la mujer lleva dos días con el feto fallecido en su vientre y temen que presente una infección generalizada.
La mujer es docente nombrada en la ciudad de Chepén (La Libertad), y los médicos de EsSalud les dijeron que su seguro no está activo; sin embargo, ella trabaja para el Estado.
Llamaron a una fiscal del Ministerio Público pero hasta el momento no se acercan a la puerta del Hospital Regional de Lambayeque.
La mujer durmió en la calle esperando que la atiendan y exigen la pronta intervención de las autoriades.
EsSalud asegura que paciente quería ser atendida en Hospital Almanzor
A través de un comunicado, EsSalud informó que efectivamente la paciente fue referida al hospital Luis Heysen destinado para atender casos COVID-19.
"Sin embargo, la paciente y su esposo no quisieron ir a Heysen, alegaron que ellos quieren que la atiendan en Almanzor y punto. Incluso amenazaron con llamar a sus influencias para que intercedan ante las autoridades de EsSalud en Lima", sostiene parte del documento.
El documento señala que, ante la inasistencia de los médicos de Almanzor, la pareja fue al Heysen, pero luego que se les explicó el procedimiento, la paciente alegó que quería ser atendida en Almanzor y volvió a ese hospital.
"La fiscal de Prevención del Delito, Candita Llempén intervino. Habló con las dos partes y su conclusión fue que la señora no quería ser atendida en Heysen", agrega.
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