Artesanos denominaron a la feria “Chihuán”, pero no para burlarse, sino para acercar más la cultura ancestral a la población.
Monederos, manteles, adornos en algodón nativo y hasta panecillos se vendieron a precios muy económicos, durante la feria que los artesanos del distrito de Monsefú denominaron “Feria Chihuán”.
Los artesanos manifestaron que el objetivo de esta actividad es colocar sus productos al alcance de toda la ciudadanía y seguir promoviendo el consumo de productos que revaloran la cultura ancestral de los pueblos, y que muestran la cultura viva y las tradiciones de los pueblos del circuito Mochica.
“La artesanía debe llegar a todos y hay pobladores que tienen dinero y otros que tienen menos recurso, situación a la que coloquialmente se le llama "estar chihuán", por eso estamos ofreciendo estos productos desde un sol, para que todos compren su llaverito, monedero, billeteras, a base de piel y escamas de pescado. Hoy se vende barato, por la gente está “Chihuán”, indicó la vendedora Martha Valencia, del distrito de Santa Rosa.
A su turno, el panadero Celestino Pisfil Aguirre manifestó que aprovechando el uso popular de esta frase, los panaderos están vendiendo alfajores y pastelitos rellenos de manjar y chantillí, a solo cincuenta céntimos.
Las mujeres artesanas dijeron que solo de esta manera buscan que su trabajo llegue a los oídos de la población, ya que hasta ahora es poco el apoyo que han recibido de las autoridades locales y regionales.
“Nosotros nos contagiamos de esta moda, no para burlarnos, sino con el único fin de que la gente sienta nuestro trabajo a su alcance y valore el telar de cintura, bordado a mano, artesanía en junco, carrizo, crohet, en paja macora, y todo lo que signifique apostar por lo nuestro. Primero lo nuestro y después el resto”, indicó la artesana de bordado a mano, Jackie Ayasta.
Esta Feria se expuso durante la presentación oficial de los 100 años de la Iglesia Evangélica “El Nazareno” de Monsefú, liderada por el pastor Bily Gran Román Balladares.
Comparte esta noticia