En RPP, Máximo Franco Becker cuestionó el continuo retraso en la discusión de una ley que regularice la actividad minera artesanal.
El presidente de la Confederación Nacional de Pequeña Minería y Minería Artesanal del Perú (Confemin), Máximo Franco Becker, afirmó que las múltiples ampliaciones del Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo) se deben a la falta de una ley que formalice una minería artesanal en el país.
En una entrevista con el programa Prueba de fuego, de RPP TV, señaló que desde “que comenzó el proceso de formalización en 2012” no se ha aprobado una legislación definitiva que permita avanzar en este proceso de manera efectiva.
“Estamos 13 años [en este proceso de formalización], y se está ampliando [una y otra vez]. ¿Por qué? Porque desde el momento que empezó el proceso de formalización el 2012, no se ha hecho una ley para formalizarse”, explicó el presidente de Confemin.
Franco Becker cuestionó el continuo retraso en la discusión de una ley que regularice la actividad minera artesanal. Aseguró que las autoridades no han mostrado interés ni capacidad para solucionar el problema, a pesar de las diversas propuestas que se han presentado desde su organización.
“Nosotros hemos hecho eventos, propuestas legislativas, decretos supremos (…), pero las autoridades no tienen ningún interés, no tienen capacidad y no les importa”. señaló Becker con firmeza.
En cuanto al proceso de formalización, el presidente de Confemin enfatizó que el principal obstáculo para los pequeños mineros es el acceso a la titularidad de los terrenos. Aseguró que la mayoría de los mineros en proceso de formalización no cuentan con un terreno propio, sino que trabajan en denuncios de otras personas o empresas.
Además, propuso una solución a largo plazo: que aquellas concesiones mineras que no hayan sido trabajadas en los últimos cinco años sean revertidas, permitiendo así que los mineros artesanales puedan solicitarlas y formalizar su actividad.
“El 97% de los mineros en proceso de formalización no tienen denuncios propios, trabajamos en los denuncios de otras empresas o personas. Nosotros no somos competencia para la gran minería. Somos un mal necesario, porque encontramos las vetas", indicó Becker.