Nuestro gobierno será recordado por haber sido un gobierno que garantiza y defiende los derechos de todos los peruanos y por haber iniciado el proceso de transformación político, económico, social y cultural, del país; convocando a la aprobación e implementación de una Nueva Constitución Política del Perú, en el año del bicentenario; abriendo las puertas al desarrollo y el progreso de los peruanos.
Llegamos al bicentenario de la república, en muy malas condiciones, con un sistema político republicano de Democracia Representativa, obsoleto, fracasado e inviable, que nos conduce a ser un “país fallido”. Este viejo sistema republicano de corte liberal, pero de corazón profundamente oligárquico, ya no funciona, excepto cuando un dictador civil o militar, desde el ejecutivo, ejerce control absoluto del Congreso, el poder judicial y órganos electorales, solo allí se hace viable el sistema político, pero nunca en democracia. Esta situación no es nueva, se ha repetido desde 1823, en varias etapas; pero lejos de construir una solución de fondo al problema, nuestros “ políticos y constitucionalistas” han ido cediendo paso al “autoritarismo”, llamándole “democracia presidencialista”, que no es otra cosa que “dictadura constitucional y electoral”.
Democracia Directa es el único partido que, ha asumido la reforma del sistema político republicano; proponemos construir una República de Democracia Total; basada en que la población dueña del poder, asuma rol de ciudadanos plenos de derechos y capaces de decidir el futuro de la patria; siendo incorporados a la toma de decisiones trascendentales para el país, a través del sistema de Referéndum. Pero no solo decimos, el 3 de octubre del 2010; convocamos al único referéndum ciudadano y aprobamos la única ley soberana - la ley 29625- aprobada vía referéndum que, devuelve los recursos del Fonavi a sus legítimos dueños, los trabajadores aportantes.
Ahora el Perú, con su Nueva Constitución y un sistema republicano de Democracia Total; donde no solo los Congresistas y el ejecutivo, deciden el destino del país; sino que, cuando sea imprescindible, la población decide, legisla y gobierna a través de un referéndum. Con esto se acabó la democracia de 5 minutos y el despotismo de 5 años; ahora la democracia es una condición permanente en la sociedad peruana. Se acaba también y para siempre con la tentación de cierre del Congreso y vacancia presidencial; porque los únicos que pueden ejercer este derecho, serán los electores a través de referéndum.
El año 2021, será recordado a nivel nacional e internacional, como el año de la refundación de la república y de la definitiva independencia del Perú; habremos recuperado el Perú para los peruanos, iniciando un proceso de descolonización mental, que nos hará definitivamente ciudadanos libres y comprometidos con el destino del Perú.
Nuestro gobierno será recordado porque hemos decidido construir una sociedad de la defensa de la vida y el bienestar para todos, muy por encima de la simple acumulación de riqueza, por unas cuantas personas.
Habremos superado el “viejo trauma” cuyo destino, de ser “vendedores de materias primas” e importadores absolutos de bienes y servicios; ese camino de pobreza no existirá más; porque el estado conjuntamente con los empresarios peruanos y patriotas, reemprenderemos el camino de la industrialización, la generación permanente de riqueza, que proveerá de los recursos necesarios para nuestro bienestar y desarrollo, donde la salud, la seguridad y la educación, son públicos, de acceso universal y totalmente gratuitos; porque ese es el derecho de todos los peruanos.
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