En el Perú el 70% de los trabajadores, es decir la mayoría se encuentran en la informalidad, por eso no gozan de derechos laborales completos y tampoco de los servicios de salud ni de pensiones, por eso es urgente elaborar un código de trabajo que encare estos problemas, código que debe ser, en lo posible, aprobado en consenso entre gremios laborales y empresariales y si no es posible resolver cada uno de los temas en el poder legislativo.
Paralelamente tenemos que apoyar a las medianas, pequeñas y microempresas para que puedan cumplir las normas laborales en beneficio de sus trabajadores. El Estado debe dictar leyes otorgando incentivos para que las referidas empresas que se encuentran formalizadas o en informalidad sean asistidas con un régimen tributario más realista porque el actual no ha funcionado, así mismo debe crearse un régimen crediticio que permita fortalecerlas económicamente, pero además se debe apoyar a los microempresarios para que puedan hacerse propietarios de un lugar seguro donde realizar sus actividades comerciales. Por eso cuando fui congresista de la República propuse un proyecto de ley para la construcción de grandes mercados populares en terrenos del Estado, que en muchos lugares están abandonados, y en dichos predios la empresa privada construya complejos comerciales, yo los llamo grandes mercados populares, para que los comerciantes informales adquieran sus puestos, a fin de realizar sus negocios. De esta manera se les formaliza, los comerciantes trabajan con tranquilidad y cumplen sus obligaciones tributarias y laborales.
Para conseguir la formalización de las empresas, las normas laborales no se pueden flexibilizar porque los trabajadores deben contar con derechos laborales mínimos para vivir con dignidad, tal y conforme lo disponen las normas internacionales de la OIT, pero además se debe tener presente que la política pública laboral debe avanzar y no retroceder en la aplicación de los derechos de los peruanos. Así mismo, se debe avanzar en
El dictado de leyes para que los trabajadores luego de jubilarse cuenten con pensiones decentes y mínimas que les permitan vivir, cubriendo sus elementales necesidades. Para eso hay que construir un sistema pensionario que responda esencialmente a la forma como se desenvuelve la economía informal.
El sueldo mínimo en Perú actualmente es de 930 soles, sin embargo, no alcanza para poder cubrir la canasta básica familiar y por eso también cuando ejercía el cargo de congresista de la República presenté un proyecto de ley para que el sueldo mínimo de los trabajadores se reajuste anualmente a fin de que no pierda su valor adquisitivo. Este proyecto lo impulsaré en el caso de llegar al gobierno, pero aplicado a empresas de ingresos que puedan cubrir estos reajustes, como por ejemplo las empresas transnacionales y grandes empresas.
Finalmente, para los jóvenes promoveré trabajo mediante el programa de Cooperación Popular, en el cual los jóvenes profesionales y técnicos, en los lugares más pobres y lejanos atenderán las necesidades y problemas de los pueblos. De la misma manera, junto con el servicio militar voluntario, el joven peruano podrá estudiar una carrera técnica en maquinarias, electricidad, informática y otras carreras técnicas, de tal manera que al culminar el servicio militar, también cuente con un título oficial que le permita trabajar y atender las necesidades personales y familiares. Cerca de 2 millones de jóvenes en estos momentos no trabajan ni estudian y eso es muy peligroso para sus proyectos de vida.
“Al obrero un justo salario lo redima de la explotación”: HIMNO DE ACCION POPULAR.
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