Si tuviéramos que mencionar a los enemigos más memorables de los santos de Athena, sin duda los caballeros negros Ankoku saints en japonés) no pasarían desapercibidos. Presentados como versiones malvadas de los protagonistas, estos santos renegados servían a Ikki en la misión de custodiar las partes de la armadura de sagitario al inicio de la serie. Sin embargo, en el anime nunca nos dijeron el origen de estos peculiares santos, que no pertenecían a ningún rango en el organigrama del santuario debido a su rechazo al mismo.
El Hipermito (la “biblia” del universo de Saint Seiya) cuenta que por el año 1500 un grupo de alquimistas rebeldes al santuario, y cuyo continente de origen había sido destruido, encontró asentamiento en una isla a la altura del Ecuador, en mitad del Océano Pacífico. Si te suena esta descripción, no es otra que la misma isla donde el Fénix entrenó y se volvió caballero.
Estos alquimistas se toparon con la armadura del Fénix y, aunque con conocimientos no superiores a los de los alquimistas de Athena, trataron de duplicar el ropaje dando origen a lo que conocemos como armaduras negras.
Poco a poco estos alquimistas empezaron a duplicar no solo armaduras de bronce, sino las de plata, aunque bien es cierto que nunca pudieron duplicar una cloth de oro ya que requería de talentos mayores, incluso si se trataba de copias. Esto generó mucha preocupación para el Patriarca de turno, quien declaró la isla como una prisión para estos caballeros renegados.
Para resguardarlos optó por enviar a algunos caballeros, pero estos caballeros tenían la característica de que eran los más crueles del santuario, siendo esta misión su castigo. Este grupo de santos sería conocido como el Clan Death Queen (o Reina Muerte). Portarían la máscara de Rangda, creada por la propia Athena y cuya habilidad es sellar a los caballeros negros.
Si esto último te sonó familiar es porque el maestro de Ikki, Guilty, fue uno de los que custodiaban la isla y a los black saints. Al ser asesinado por Ikki (como vimos en el anime), los caballeros negros pudieron liberarse de la prisión y formar parte de las filas del entonces renegado caballero de Fénix, desencadenando los hechos que todos ya conocemos.
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