Los ciudadanos priorizan el uso de la bicicleta como medio de transporte, mientras que las autoridades invierten en espacios adecuados y seguros. José Silva, del colectivo Biciñan, nos cuenta el valor y los avances en el uso de este vehículo.
La pandemia ha quitado muchas cosas al mundo, pero también, ha echado luces para ver que podemos rehacer nuestras ciudades y darle, por ejemplo, más espacios a la bicicleta, un medio de transporte ecológico y saludable. Sino, que lo digan en Cusco, donde las cuarentenas generaron la habilitación de ciclovías.
José Silva tiene 64 años y es vocero del colectivo Biciñan. Él le contó a RPP Noticias cómo es que la bici jugó un rol importante en el 'Obligo del mundo'.
“Durante la pandemia, la bicicleta cumplió una función importante porque no había tráfico y había seguridad, (las autoridades y ciudadanos) implementaron y segregaron algunas vías… Ahora (el uso de la bicicleta) bajó un poquito, pero la seguimos usando”, dijo el vocero.
Las medidas restrictivas dictadas por el gobierno para frenar los contagios impulsaron el uso masivo del vehículo de dos ruedas. Además, obligaron a las autoridades locales a poner en agenda la habilitación e implementación de ciclovías.
Sin embargo, al concluir el confinamiento, las calles volvieron a estar repletas de automóviles y, según un conteo de Biciñan, casi mil 500 ciclistas que circulaban a diario en la “Ciudad Imperial”, volvieron a ser desplazados.
Según José Silva, la pandemia ayudó a entender que las bicicletas no pueden volver a los almacenes y, debido a su buena aceptación como medio de transporte, las autoridades locales decidieron invertir en más ciclovías acordes a las características de la sierra.
“Desde marzo, las ciclovías se trasladarán al lado izquierdo de la vía en la avenida de La Cultura y 28 de Julio. En el caso de la avenida El Sol, será una vía compartida con los vehículos motorizados…. En la avenida Túpac Amaru, ya están habilitadas y señalizadas”, dijo.
Pero esto no es todo, desde hace más de seis domingos, rutas enteras en La Alameda y óvalo Pachacuteq, avenida 28 de Julio, hasta el óvalo Libertadores, fueron abiertas en su integridad para el uso de bicicletas.
“Tengo 64 años de edad y la bicicleta la manejo desde hace años por salud y de manera competitiva. Y mi estado de ánimo es 'wow'... Tengo un buen estado de ánimo”, explicó el vocero de Biciñan.
Para José Silva, la pandemia de la COVID-19 enseñó a los cusqueños a priorizar el uso de medios de transporte ecológicos que cuiden el medio ambiente y ayuden a mejorar la salud de los ciudadanos.
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