¿Cuál fue el proceso para crear "Roma", la película más nominada al Oscar 2019?

Los Oscar 2019 tienen una protagonista: montar la película "Roma" ha sido una labor complicada y muy delicada porque recrea la memoria de su director, Alfonso Cuarón, y también "titánica" por la cantidad de escenarios que tuvieron que construir.

Partiendo de los recuerdos de Cuarón, todo el equipo técnico se puso a disposición del realizador para escucharle porque, a partir de su relato, se construyó una película que ha conseguido 10 nominaciones al Oscar 2019.

Un éxito que es producto de un gran esfuerzo colectivo como resalta Eugenio Caballero ─candidato al Oscar por el diseño de producción de "Roma" junto a Bárbara Enríquez─ quien reveló cómo había un "guion muy bien escrito" por Alfonso Cuarón aunque no lo quiso compartir, ni siquiera con los actores.

RECONSTRUIR LA INFANCIA

El trabajo empezó con larguísimas conversaciones para, a través de lo que el director recordaba de su infancia, determinar los temas que quería explorar en la cinta.

La suma de los pequeños detalles permitió poner en marcha el proyecto y determinar, por ejemplo, que había que construir desde cero un decorado de la famosa avenida de Insurgentes de la capital mexicana.

"Empezamos hablando de qué había en la mesa a la hora de cenar o cuál era su juguete preferido, el aroma que despertaba un puesto ambulante que había en la esquina de su casa, qué revistas eran las que él leía en el kiosko...", recuerda Eugenio Caballero.

"Roma" se rodó en algunos escenarios reales, pero la mayoría fueron reconstruidos sobre la memoria de Alfonso Cuarón como la casa, el principal escenario de la historia, que se situó en un vivienda similar que encontraron cuando estaba a punto de ser derruida.

CAOS ENTRE TOMAS

Allí se desarrolló la cinta encabezada por Yalitza Aparicio, como la criada Cleo, y Marina de Tavira, como la madre -ambas nominadas al Oscar 2019. Una mayoría de intérpretes noveles dieron vida a la familia de Cuarón en una historia que se rodó en orden cronológico y sin que los actores supieran hacia donde iban sus personajes.

"Alfonso creaba un caos entre ellos entre toma y toma, les daba instrucciones juntos y por separado y se contradecía para lograr reacciones más naturales", explica Eugenio Caballero, que considera que "Roma" fue un reto continuo para todo el equipo.

Él ya ganó un Oscar por la dirección artística de "El laberinto del fauno" junto a Pilar Revuelta. Dos películas muy diferentes y dos ejemplos del éxito de los cineastas mexicanos, algo que no cree que sea producto de una fórmula.

Es más bien la mentalidad mexicana "de ayudarse los unos a los otros" y de haber crecido Alfonso Cuarón, Guillermo del Toro y Alejandro González Iñárritu, en una época en la que hacer películas en México era "casi un acto de fe y de testarudez". (EFE)