El 40% del presupuesto del sector Educación está destinado a la mejora de las universidades públicas, de acuerdo con cifras del Ministerio de Economía; sin embargo, RPP Data encontró que hay instituciones que hasta la fecha han ejecutado solo el 2% o 3% del dinero asignado.
A cuatro meses de acabar el año, 28 de las 52 universidades públicas que existen en el país no han utilizado ni el 20% del presupuesto que les asigna el Estado para mejorar sus instalaciones, equipar bibliotecas o, incluso, tan solo arreglar sus servicios higiénicos.
Esta falta de capacidad para ejecutar el dinero, revisada por RPP Data en el portal de Consulta Amigable del Ministerio de Economía, no solo afecta a los 370 mil estudiantes de educación superior que existen actualmente, de acuerdo a cifras del Minedu, sino también a los postulantes que buscan acceder a una educación de calidad.
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La ley de contrarreforma universitaría afectó la asesoría técnica que brindaba el Minedu a las universidades públicas, indica Jorge Mori, experto en educación superior.
"Las universidades públicas no cuentan con el personal suficiente ni con la remuneración adecuada para generar las capacidades necesarias en la ejecución [del presupuesto]. Esto siempre las coloca en la cola de ejecución dentro de todas las unidades del sector Educación", explica Daniel Alfaro, exministro de Educación y fundador de Pirka Consultoría. Pese a ello, sostiene que ejecutar menos del 20% es un porcentaje bastante bajo para el récord histórico de estas instituciones.
Así tenemos que, según cifras del MEF, las universidades que menos dinero han ejecutado son: la Universidad Nacional del Centro del Perú (Huancayo), a la que se le destinó S/ 20,317,079, pero, hasta la fecha, solo ha ejecutado el 2.1%; la Universidad Nacional San Luis Gonzaga (Ica), que ha recibido S/ 32,628,275 y solo ha gastado el 3.5%. Mientras que la Universidad Nacional Intercultural Fabiola Salazar Leguía de Bagua (Amazonas) ha obtenido S/ 8,946,274 y solo ha utilizado el 4.6%.
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"Las universidades públicas deben ser de las instituciones que menos pagan [a sus empleados] en el Estado, incluso menos que un Gobierno Regional o un Ministerio. Eso hace que tengan muchas dificultades para convocar y retener al mejor talento profesional para sus áreas administrativas [que se encargan de la ejecución del gasto]", añade el experto en educación superior, Jorge Mori.
La que más presupuesto recibió este 2023 es la Universidad Jorge Basadre Grohman (Tacna) con S/ 83,522,788 y, hasta la publicación de esta nota, solo ha ejecutado el 13% de este dinero. Mientras que a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima) se le asignó S/ 59,363,317 y ha ejecutado solo el 19% del total.
¿A qué se debe esta baja ejecución del presupuesto?
Uno de los motivos, ya mencionados, es la falta de recursos humanos y buenas remuneraciones para generar las competencias necesarias. Pero otro, agrega Jorge Mori, tiene que ver con la ley de contrarreforma universitaria.
"Desde que se aprobó esta ley [en julio del 2022], el Ministerio de Educación ha dejado de darle asistencia técnica a las universidades públicas. La falta de este acompañamiento está perjudicando a las instituciones y a sus equipos administrativos, pues el expertise que tenían los funcionarios del Minedu permitía que, hasta el 2021, el presupuesto ejecutado por las universidades públicas fuera incrementando", detalla.
A esto se le añade que las instituciones de educación superior afrontan escenarios para los cuales no se encuentran bien preparadas, por ejemplo, para diagnosticar sus brechas, programar correctamente sus inversiones públicas y generar una buena cartera de proyectos de infraestructura que atienda sus necesidades", apunta Karla Gaviño, profesora de la Escuela de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico.
Mejora de tecnología y ampliar vacantes
El 40% del presupuesto de todo el sector Educación es dirigido a las universidades públicas, según cifras del MEF. Jorge Mori sostiene que este dinero debería dirigirse a atender los retos de la transformación digital que se está viviendo en los países de América Latina y a nivel global en general. "Las universidades tienen que estar a la par de todos estos procesos en lo pedagógico, en la gestión y en la investigación", detalla.
El otro rubro que se debe priorizar es el incremento del número de vacantes, agrega el experto. Esto, sobre todo, después del cierre de cerca de 50 universidades privadas al no cumplir con los requisitos de calidad para conseguir el licenciamiento de la Sunedu.
"Muchos de los jóvenes que aspiran a una educación tienen como única alternativa una universidad pública. Sin embargo, estas solamente representan el 30% de la matrícula en las universidades peruanas. Esto es muy por debajo de lo que hoy ofrecen las privadas", indica. Por ello, Mori remarca la urgencia de que el Minedu vuelva a brindar la asistencia estratégica a todas las universidades públicas, junto con la mejora en las condiciones laborales y salariales del personal administrativo.
Sobre ello, Alfaro agrega que es importante que la relación entre el Ministerio de Educación y la universidad se fortalezca. "Se deben generar algunas estrategias para generar esos cambios y mejoras, pero siempre en línea con el interés superior del estudiante", comenta.
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